Pues aquí, trasnochando....con un imsonio de esos en los que sientes que puedes arreglar el mundo, pero principalmente el tuyo. Con ganas de tener en el día la energía que surge en la noche. Tan sin pedirla, tan gratuita pues. Viendo toda la vida y las vidas en el famoso internet. Revisando como se despoja el anonimato de un modo tan "estelar"?. La reflexión está muy, pero muy escondida. Bien guardada en el intersticio profundo y oscuro de algún archivo prohibido, con algún password que no conocemos (ni queremos).
Se busca la vanalidad como buscar la filosofía más preciada. Se encuentra lo anodino codeándose con los problemas existenciales de los seres ociosos (como yo, por supuesto). Y los demás problemas?....y las penas que nacen de las necesidades vitales como el hambre, el sueño y las enfermedades?...pues también están ahí...cohexistiendo en este mundo tan plural que a veces me asusta. Tan obstinadamente globalizado, que siento como las pequeñas cosas huyen asustadas para no perder su preciosa identidad.
Se busca la vanalidad como buscar la filosofía más preciada. Se encuentra lo anodino codeándose con los problemas existenciales de los seres ociosos (como yo, por supuesto). Y los demás problemas?....y las penas que nacen de las necesidades vitales como el hambre, el sueño y las enfermedades?...pues también están ahí...cohexistiendo en este mundo tan plural que a veces me asusta. Tan obstinadamente globalizado, que siento como las pequeñas cosas huyen asustadas para no perder su preciosa identidad.
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