sábado, 2 de mayo de 2009

algo de nada


Había que levantarse....las 7 a.m., no hay ganas..pero hay obligación. No entiendo. Es una cosa que se llama responsabilidad; algo que te angustia y te mortifica; no te deja dormir. Piensas que te que puedes quedar en la cama una eternidad. Eso es falso. Todo tiene que ver con la educación, digo yo. Con la educación casera, por supuesto, la de tu papá levantándose a las 4 de la mañana a poner el café; la de tus tías quitándote la cobija en las mañanas de invierno. La de tu madre empecinada en que nunca faltes a clases. Es una enfermedad digo yo. Ya no se estila eso de llegar temprano; y la gente con una cachaza inmensa es capaz de llegar una hora tarde, o simplemente nunca llegar y como si nada. Nadie se mortifica.

Se inventa excusas y la cama es deliciosa; pero puedes sufrir. Más nos vale. Mas te vale.

ya no queda nada...tengo que levantarme; mi perra escucha un ruido y empieza a mover la cola contra las sillas, se encarama en la ventana. La gata se tira del cooler produciendo un estruendo. Sí...es mi hora de hacer café...es mi hora de imitar a mi padre. El tiempo nos hace parecernos.