Empezando sin querer, porque la vida así se sucede, sin pedirte ningún permiso, sin que le muestres tu pasaporte. La vorágine del año inicia lenta; las actividades un poco adormiladas, se hacen perentorias hacia el final del semestre. Sí, porque la vida de los maestros es semestral, lo tengo que aclarar para todos los lectores nulos que tengo. Dejé de escribir no porque no haya información, lo que no hay son lectores interesados. Tal vez tenga que incluir otras cosas en mi blog para que sea interesante. O será que ya nada nos interesa ni nos mueve?.
Lo último en mi desnaranjado pueblo de Hermosillo es, aparte del cierre de uno de los dos pulmones de nuestra ciudad (en aras de esas Musas tan dormidas que ya no son de Apolo, sino del gobierno), el cese de la edición cultural del único (para qué negarlo) periódico de la ciudad y del estado: El Imparcial. El imparcial ha decidido que la cultura no vende, que no tiene ningún sentido hacer una crónica de los aspectos culturales de nuestra ciudad: no importan espectáculos de danza, teatro, música, cine; no valen exposiciones, reseñas literarias, eventos que contradigan a la cultura de la carne asada. El imparcial, periódico sonorense, no se siente comprometido con la ciudad que lo ha hecho prosperar. El imparcial no se siente con obligación moral, la obligación moral que todo medio de comunicación tiene con su entorno. Los Healy parecen olvidar que cada persona que ostenta el poder (el de los medios y el económico) tiene un compromiso ético con el pueblo que lo ha encumbrado. Las sociales, con sus babyshowers y sus despedidas, sus bailes de beneficencia, sí son motivo publicable; la nota roja, ni se diga: todos queremos saber a quién violaron este día, cuántos carros chocaron y quién vendía droga; el morbo nos anima a adquirir el periódico, la cultura no. No importa que en nuestra ciudad haya cada día más público para danza, que tengamos temporadas de teatro, que haya conciertos semanales, festivales bien establecidos....ESO A NADIE LE IMPORTA....o SÍ? O SE TRATA DE QUE NO NOS IMPORTE?
