y si...?

Cuál es la frontera entre lo correcto y lo incorrecto? (y por favor no saquen a relucir a los filósofos!, lo mío es totalmente pedestre); quién tiene la prerrogativa de la perfección?, por qué no admitir multiplicidad de conductas? por qué creer que hay un único modo de comportarse?, por qué seguimos admitiendo la individualidad pero al mismo tiempo ciñendo el proceder a una celda hermética y diminuta?. Estamos llenos de contradicciones, es un hecho, entonces por qué nos cerramos al cambio?, por qué cuadrar eso que "siempre creímos" a una realidad tan cambiante como la nuestra (me viene a la mente el Violinista en el Tejado: TRADICIÓN). Será que el miedo es lo más difícil de combatir? El miedo al cambio? a que esa diferencia nos funcione de algún modo?, a romper las formas establecidas de una felicidad incierta y fracturada, pero cómoda?....Y si.....y si....por casualidad nuestra mente no tuviera candados?, si nuestro cerebro se vaciara de mil prejuicios?...y si...y si.....eso nos hiciera felices y menos egoístas?; y si fuera la clave de la tranquilidad y la paz interior?..pero tenemos miedo de explorar. Somos viajeros temerosos de nuestra propia vida. Nos atrevemos a ver lo visto, aunque no nos proporciones placer ni alegría. Preferimos la comida tradicional, la cerveza que todos toman, los lugares que frecuenta la mayoría, el vino y el antro de moda; todo dentro del canon marcado por seres anónimos que se vuelven rectores de nuestra vida; anónimos que temporal y espacialmente nos son ajenos. En el momento que decidimos cambiar la ruta, podemos toparnos con sinsabores y desgracias, pero...y si.....encontramos la ambrosía?, si subimos al Olimpo?, si las delicias opacan los sinsabores?...y si.....la tranquilidad tanto buscada está ahí, en ese lugar ignoto y extraño al que no nos atrevíamos a llegar?.....y si........nos atrevemos?