Urge que la cordura me tome por asalto. Urge que yo lo niegue, que piense que risa y llanto no se llevan bien. Urge que las manos ya no finjan risas y que los ojos se beban todas las estrellas de una noche sin luna. Urge que las palabras se agolpen en mi sien, para que después salgan flotando por mi boca y lleven ideas viejas a mentes nuevas. Urge que no me engañe a mi misma con promesas vanas y proyectos inútiles; que todo sea justo, conciso y elemental. Urge que los caminos no se crucen y las almas se esfuercen en perdonar; que los amantes sean generosos y contagien a los banqueros; urge que yo entienda mis misterios para respetar los ajenos; que vaya por la vida platicando con las chuparrosas y cantando con las flores. Urge que la música me tome por sorpresa el corazón, me haga suya......y que las imágenes revoloteen pidiéndome que las haga felices, que las haga propiedad pública. Me urge el tiempo del no tiempo, y no puedo evitarlo, en serio que no puedo.
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