lunes, 13 de junio de 2011

tardeando


La mediocridad llegó a buscar su lugar. Se fue metiendo como sierpe en los hogares; llegó a las escuelas, al gobierno, a las iglesias.....llegó para quedarse de manera callada; su disfraz fue la retórica, las acciones pequeñas y falsas; se vistió de importancia y sobriedad, cuando la realidad era que estaba desnuda de conocimientos y enjuta de valores. La mediocridad se buscó papeles que la avalaran; luchó por puestos públicos, alcanzó el reconocimiento de todos. Se instaló en la facilidad del pensamiento, en la estulticia de cada uno de nosotros. La mediocridad no asombra ya; es el genio el que asusta; el genio indomable de la minoría; lucha a muerte contra la multitud infectada. El propio reconocimiento de la mediocridad sería un paso, pero no, no es así, millones son buenos, trabajadores, comedidos, inteligentes y honestos; miles hacen lo mejor que pueden, no lo poco que quieren. El otro es mi obstáculo, hago como que hago y merezco más. Esta mediocridad me sirve para pisar, burlar, corromper, ascender por lugares insospechados. Esta mediocridad no es discreta, no guarda silencio, se grita a voz en cuello. Se alaba y se reconoce. Los inteligentes saben que está ahí, quieren abatirla y se inventan excusas bellas y vistosas. Los inteligentes pueden jugar con ella, sobre todo si la pereza se sienta en el trono. Pero los tontos no la distinguen, no les molesta ni tan siquiera la reconocen. Entonces la mediocridad se les mete en el tuétano y ya no hay escape. No sé si la ignorancia sería virtud en tales casos. Quisiera ser lo suficientemente tonta para no distinguirla, o lo suficientemente inteligente para jugar con ella....pero simplemente sé que está ahí, que se levanta como una pared insalvable; que todos los días libro mi propia batalla, sin compañía, cuerpo a cuerpo....no hay nada escrito, podré ganar? no lo sé.... ni siquiera tenga esperanza, sólo entiendo que luchar es la única forma de darle su lugar, de moverme subrepticiamente y esconderme en el lado opuesto.....de tocar lo intocable, o simplemente ver el horizonte ajeno.

3 comentarios:

  1. Me hago el tonto para no sospechar de mí...
    y prefiero jugar ruleta rusa
    y hacer,
    ya ser,
    yacer.


    (Caligrama dedicado a na die)

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  2. la cosa anterior surgió por escritura automática, luego de leer "tardeando"

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  3. siempre es bueno abrir las puertas.....aunque nos parta un rayo...
    y con las palabras.....jugar sin juzgar......y entre
    y hacer, ya ser, yacer...YA HACER, imperativamente.

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