sábado, 14 de julio de 2007

en la canícula......y todavía en las preguntas...

Hace calor, que puede esperarse? vivimos en Hermosillo, el centro de veraneo del Diablo. Desde temprana hora sabemos que el día estará Perro. Los sudores son mayúsculos y son mentiras que exista algún desodorante efectivo. No crean la publicidad. Al mediodía viene la Malora.....y es mejor estar recluída en casa, enrolada en cualquier actividad indoors. La Televisión no ofrece consuelo; poca gente en la red...así que es mejor tomar un libro y viajar a otro mundo menos caluroso que el nuestro.
Otra posibilidad es reflexionar; aunque esto no sea muy popular en nuestro tiempo, verdad?...quién quiere pensar en su vida?...en la de los otros?....aún así...es una actividad que no requiere de un espacio particular, ni de luz, ni de televisión, ni de internet; a lo sumo un buen café o una limonada bien fría. Y para ponerme a tono...suelo pensar que mis 48 son en realidad como mis 18, sólo que ahora estoy notoriamente más antigua, llena de arrugas, canas y POR SUPUESTO, más gorda; pero, más sabia? NO, más cuerda? NO. En realidad me asaltan las mismas dudas existenciales pendejas que tenía en la adolescencia. Es triste mentir, verdad?, porque uno tiene que andar por la vida como gente adulta, pensante y lógica, cuando en realidad a veces te dan ganas de mandar todo a la chingada y empezar proyectos nuevos. Pero bueno...a lo mejor esa es la diferencia de 48 y 18, verdad?, que uno no puede botar las cosas nomás porque sí.
Tu sabes, amiga Cecilia, que seremos jóvenes de mente y ruquísimas de cuerpo; que siempre querremos vivir la vida sencilla y simple. Que añoramos una vida que no es, pero que peleamos porque aparezca en el futuro: una tranquilidad apacible, una seguridad sin lujo, una tolerancia y un respeto sin límites....Tu lo sabes bien, queremos lo mejor para todos. La Felicidad en un paquete económico; la Felicidad como interés social y bien común. Qué es esa felicidad?...todavía no estamos seguros...por eso la perseguimos con tanto empeño. Está en la mañana calurosa, en el café mañanero, en el tráfico cotidiano, en las bromas y en las prisas, en los hijos, alumnos, parientes y amigos....en esa infancia tan idealizada....y tan poco cuidada. Está en nuestras mentes, amiga, para qué negarlo. La fabricamos con tesón para que se no quede impregnada. Para que la imaginemos como un futuro siempre en puerta. Amiga y amigos lectores. Hora de cortar tanto alucine...tanto producto de la holgazanería..
un beso...y sean felices sea cual fuera su felicidad.

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