Se puede escribir de todo. Se pueden poner palabras exóticas que digan todo y nada. También uno se puede sentar debajo de un mezquite, saborear una cerveza extremadamente fría, mientras las palabras de una novela te transportan en tiempo y espacio. Un viaje agradable y sorprenderte, porque se puede interrumpir en cualquier momento para volver a tu realidad. Para ver algún pájaro que casi te cuacha en la cara; para percibir el aire suave y fresco en tu piel. Simplemente para disfrutar el sol, el aire, el polvo, pero sobre todo, el ocio. El ocio que nos permite usar el tiempo sin prejuicio ni pecado. El ocio que alienta el pensamiento a lugares insospechados; el ocio sin temor ....sin oficio, sin réplica..el ocio que se emparenta con la flojera y la lasitud corporal. Se puede escribir de todo, pero a veces es mejor estar en silencio y dejar que las palabras viajen por ti, sin pedirles nada, ni significado, ni razón ni orden....es bueno jugar un poco con aire, hoja, tierra, perro, pies y sol....es bueno que todos tengan un momento de nada y todo.
Después vendrán palabras que son tarea, aseo, reuniones, clases..palabras que pueden ser divertidas cuando les quitamos lo importante......lo tontamente importante...
se quiere mucho se hace poco.....eso poco..puede marcar un sutil diferencia.
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